Grandes Héroes del siglo XX
Hero System - Pulp Años 30
Una mañana cualquiera en el Nueva York de 1935, un hombre, de cualidades físicas y mentales excepcionales, levanta enormes pesas como parte sus entrenamientos diarios en su apartamento del Empire State Building. Por la tarde, Clark Savage Jr. visitará el Museo de Historia Natural pues, el entrenamiento de la mente es tan importante como el del cuerpo.
El ilusionista "Mandrake el Mago" se encuentra esa tarde en plena actuación en el Castillo Belvedere de Central Park, haciendo las delicias de niños y adultos.
Lord Greystoke finaliza su comida con el Alcalde de Nueva York, a la que ha acudido con su mujer Jane y el hijo de ambos, en un restaurante de moda a varias manzanas.
Mientras tanto, en una zona menos concurrida de Central Park, tiene lugar un encuentro entre el anciano Isaac Twambley y un curtido criminal italiano, jefe de una banda. El Señor Twambley pretende contratar los servicios del delincuente para robar una pieza de museo con trasfondo esotérico. La curiosidad del viejo por las artes oscuras, le lleva a ofrecer dinero, además, por cualquier información sobre un misterioso villano con cierto halo sobrenatural, que ha estado actuando recientemente.
Se separan tras un acuerdo inicial pero, cuando el anciano Isaac Twambley se dispone a seguir en secreto al delincuente que se marcha, un temblor repentino sacude toda la zona.
Una densa nube de vapor caliente cubre rápidamente el parque. Los gritos de los visitantes asustados se escuchan al instante.
Los temblores se sienten por toda la ciudad y los edificios más cercanos al parque comienzan a resquebrajarse. Doc Savage toma el control en el Museo, salva a varias personas de caer al vacío o morir aplastadas y corre hacia el parque al ver la repentina niebla que surge de allí.
Mandrake y su forzudo amigo Lothar, sacan a la gente del Castillo mientras el calor aumenta rápidamente. Muy cerca de ellos ven como hierve el agua del lago.
Tarzán, desde el restaurante, siente el temblor y también los bramidos de pánico de uno de los elefantes del Zoológico de Central Park. Pide a Jane que marche con su hijo al hotel mientras él acude a salvar a los animales en peligro.
Isaac Twambley, aunque no puede ver entre la densa y sofocante niebla, imita diferentes voces para atraer a la gente asustada en la dirección correcta alejándola de la zona del lago. Cuando ya no escucha a nadie cercano, abandona su disfraz para asumir una vez más el manto de La Sombra.
El temblor continúa hasta que se desencadena un suceso de extrema violencia. ¡Un volcán emerge en Central Park expulsando lava y proyectiles incandescentes!
El ilusionista "Mandrake el Mago" se encuentra esa tarde en plena actuación en el Castillo Belvedere de Central Park, haciendo las delicias de niños y adultos.
Lord Greystoke finaliza su comida con el Alcalde de Nueva York, a la que ha acudido con su mujer Jane y el hijo de ambos, en un restaurante de moda a varias manzanas.
Mientras tanto, en una zona menos concurrida de Central Park, tiene lugar un encuentro entre el anciano Isaac Twambley y un curtido criminal italiano, jefe de una banda. El Señor Twambley pretende contratar los servicios del delincuente para robar una pieza de museo con trasfondo esotérico. La curiosidad del viejo por las artes oscuras, le lleva a ofrecer dinero, además, por cualquier información sobre un misterioso villano con cierto halo sobrenatural, que ha estado actuando recientemente.
Se separan tras un acuerdo inicial pero, cuando el anciano Isaac Twambley se dispone a seguir en secreto al delincuente que se marcha, un temblor repentino sacude toda la zona.
Una densa nube de vapor caliente cubre rápidamente el parque. Los gritos de los visitantes asustados se escuchan al instante.
Los temblores se sienten por toda la ciudad y los edificios más cercanos al parque comienzan a resquebrajarse. Doc Savage toma el control en el Museo, salva a varias personas de caer al vacío o morir aplastadas y corre hacia el parque al ver la repentina niebla que surge de allí.
Mandrake y su forzudo amigo Lothar, sacan a la gente del Castillo mientras el calor aumenta rápidamente. Muy cerca de ellos ven como hierve el agua del lago.
Tarzán, desde el restaurante, siente el temblor y también los bramidos de pánico de uno de los elefantes del Zoológico de Central Park. Pide a Jane que marche con su hijo al hotel mientras él acude a salvar a los animales en peligro.
Isaac Twambley, aunque no puede ver entre la densa y sofocante niebla, imita diferentes voces para atraer a la gente asustada en la dirección correcta alejándola de la zona del lago. Cuando ya no escucha a nadie cercano, abandona su disfraz para asumir una vez más el manto de La Sombra.
El temblor continúa hasta que se desencadena un suceso de extrema violencia. ¡Un volcán emerge en Central Park expulsando lava y proyectiles incandescentes!
Tarzán ha llegado al Zoo. Ante el calor se quita casi toda la ropa y con su lenguaje de la selva calma a los animales. Como el peligro aumenta, saca a los animales de las jaulas y los conduce a una zona más segura del parque.
Doc Savage llega a la zona del Castillo, donde encuentra casi finalizada la evacuación pero, el misterioso justiciero, al que llaman La Sombra, le pide ayuda. Una familia ha quedado aislada en un islote rodeado por lava ardiente. Si no los sacan pronto, el simple calor los matará.
El oscuro vigilante podría saltar hasta ellos pero después no podría sacarlos. El Hombre de Bronce, sin embargo, es capaz de llegar y los arroja sobre tierra firme, uno a uno, con sus poderosos músculos.
Mientras conducen a los últimos supervivientes a distancia segura bajo una lluvia de ceniza, Doc Savage, Mandrake y La Sombra, ven pasar un grupo de animales liderados por un hombre semidesnudo montado sobre un elefante.
Los cuatro se presentan formalmente, aunque todos se han reconocido por su reputación.
Doc Savage y La Sombra recuerdan un suceso similar provocado, hace unos diez años, por un villano megalómano que se hacía llamar Volcano Master. En aquella ocasión sucedió en la costa del Pacífico y fue detenido por el Capitán Batalla, ahora retirado.
Lord Greystoke propone ir a hablar con su amigo el Alcalde para averiguar todo lo posible.
La Sombra se despide de ellos con la intención de recabar cualquier información en los bajos fondos.
Ya en el Ayuntamiento, el Alcalde ha recibido a Lord Greystoke, Doc Savage y Mandrake. Les agradece su ayuda en la evacuación del parque y les asegura que está tan sorprendido como ellos. Se une en breve a la reunión Lamont Cranston, un hombre de gran fortuna conocido del Alcalde. Se ofrece a ayudar en todo lo que esté en su mano.
Una llamada del Alcalde a un contacto en el Departamento de Defensa les revela que hubo una exigencia previa al ataque. Volcano Master pidió que se desmantelara todo el ejército del país. Algo que no tomaron en serio.
Como los planes del villano fueron frustrados la primera vez por el Capitán Batalla, deciden ir a visitarle a su casa de las afueras para conseguir más información.
Este les recibe y les explica que ese científico loco usó algún tipo de máquina que emitía ondas telúricas. Aquel aparato tarda unos minutos en cargarse y eso les dio un margen para revertir el proceso en aquella ocasión. Piensa que podría hacerlo desde cualquier punto del planeta.
Aquella vez lo localizaron triangulando las lecturas de los sismógrafos. No puede darles más detalles por que Volcano Master consiguió escapar.
Doc Savage llama a sus contactos en centros científicos o universidades para que le envíen los datos sísmicos y con ellos calcula el posible origen del ataque. La máquina debe hallarse en mitad del Océano Índico, casualmente un punto no cartografiado, pues no aparece ninguna masa de tierra en los mapas.
Al día siguiente, los cuatro se reúnen y establecen un curso de acción.
Viajarán de incógnito a Ceilán y allí alquilarán un barco mercante y un hidroavión.
Se preparan y en unas horas embarcan en un vuelo comercial.
A su llegada preguntan en la oficina portuaria y solo encuentran un barco disponible, el Sea Girl, capitaneado por un Galés al que apodan "El Viejo".
Su tripulación no es menos pintoresca. El más peculiar es Steve Costigan, irlandés, marino y boxeador, con su inseparable compañero, el bulldog llamado Mike.
Bill O'Brien, otro irlandés y el mejor amigo humano de Steve. Mushy Hanson, marino danés y poeta amateur. Por último, Sven Larson, un sueco enorme, también boxeador.
Sin contarle mucho al viejo capitán, una vez cargado el hidroavión, un viejo aparato de dos plazas con ametralladoras Vikers y un cañón de 37mm, parten hacia lo desconocido.
El viejo les asegura que en todos sus años de navegación, no ha visto nada recorriendo esa ruta.
A falta de un buen tramo del trayecto previsto, encuentran un denso banco de niebla. Convencen al Viejo de que pare máquinas allí mismo.
Doc Savage pilotará el hidroavión y hará un reconocimiento. Lord Greystoke decide acompañarle y deja a Chita al cuidado del ilusionista. Madrake y La Sombra no tienen más remedio que permanecer en el barco hasta su regreso.
Los dos héroes vuelan entre la niebla unas horas hasta que encuentran una zona despejada y en su centro una isla desconocida que no debería existir. Deciden rodearla para intentar divisar algún rastro de vida. Sin embargo, poco tardan en divisar en el aire otro avión en rumbo de intercepción. Parece un avión de combate alemán mucho más rápido y maniobrable que el viejo hidroavión.
La elección es obvia, deben escapar hacia la niebla antes de que los derriben pero, el caza alemán comienza a dispararles y les alcanza. Con una arriesgada maniobra en picado, Doc Savage es capaz de zafarse del enemigo por unos instantes, lo suficiente para hacer un amerizaje forzoso cerca de la isla y saltar del aparato.
El hidroavión levanta una cortina de agua deslizándose sobre la superficie y termina estrellándose contra los acantilados de la isla. Los dos héroes han conseguido saltar y se sumergen esperando que les den por muertos.
En el Sea Girl, Madrake y La Sombra comienzan a preocuparse. Han calculado el tiempo que deberían tardar en volver sus compañeros y la cantidad de combustible del que disponían. Algo debe de haberles ocurrido.
Piden al Capitán que avance. No escuchan ningún motor en el aire durante el tenso trayecto. Cuando al fin atraviesan la niebla y ven la isla, La Sombra ordena al Viejo parar máquinas y volver a ocultarse en la niebla. Bajará en un bote e intentará llegar a la isla. Madrake y Chita le acompañarán.
A pesar de ser una embarcación pequeña, son descubiertos. Frente a ellos emerge de las aguas un submarino. Rápidamente saltan del bote para simular que ha sido arrastrado a la deriva. Los poderes mentales de ambos pueden enmascararles a los ojos de sus rivales pero, La Sombra presiente que algo malo sucede y Madrake le grita que se aleje del bote, pues ha visto unas burbujas entre ellos y el submarino. El torpedo impacta en su objetivo. Por suerte, la explosión no acaba con ellos.
Ambos deciden nadar hacia la isla pero, La Sombra se acerca al submarino por si sus tripulantes salen a rematar el trabajo. Así contempla algo terrible, de la escotilla surgen ¡tres soldados alemanes que parecen muertos, sus uniformes manchados de sangre, cubiertos de algas y envueltos en una misteriosa fosforescencia!
La isla tiene tan solo una playa accesible desde el mar, los héroes no tienen más remedio que alcanzarla a nado.
¿Se encontrarán en la playa los cuatro compañeros?
¿Que misterios y peligros se esconden en este lugar?
¿Son los alemanes y Volcano Master su peor enemigo o descubrirán algo más oscuro?
... continuará en la siguiente sesión.
Doc Savage llega a la zona del Castillo, donde encuentra casi finalizada la evacuación pero, el misterioso justiciero, al que llaman La Sombra, le pide ayuda. Una familia ha quedado aislada en un islote rodeado por lava ardiente. Si no los sacan pronto, el simple calor los matará.
El oscuro vigilante podría saltar hasta ellos pero después no podría sacarlos. El Hombre de Bronce, sin embargo, es capaz de llegar y los arroja sobre tierra firme, uno a uno, con sus poderosos músculos.
Mientras conducen a los últimos supervivientes a distancia segura bajo una lluvia de ceniza, Doc Savage, Mandrake y La Sombra, ven pasar un grupo de animales liderados por un hombre semidesnudo montado sobre un elefante.
Los cuatro se presentan formalmente, aunque todos se han reconocido por su reputación.
Doc Savage y La Sombra recuerdan un suceso similar provocado, hace unos diez años, por un villano megalómano que se hacía llamar Volcano Master. En aquella ocasión sucedió en la costa del Pacífico y fue detenido por el Capitán Batalla, ahora retirado.
Lord Greystoke propone ir a hablar con su amigo el Alcalde para averiguar todo lo posible.
La Sombra se despide de ellos con la intención de recabar cualquier información en los bajos fondos.
Ya en el Ayuntamiento, el Alcalde ha recibido a Lord Greystoke, Doc Savage y Mandrake. Les agradece su ayuda en la evacuación del parque y les asegura que está tan sorprendido como ellos. Se une en breve a la reunión Lamont Cranston, un hombre de gran fortuna conocido del Alcalde. Se ofrece a ayudar en todo lo que esté en su mano.
Una llamada del Alcalde a un contacto en el Departamento de Defensa les revela que hubo una exigencia previa al ataque. Volcano Master pidió que se desmantelara todo el ejército del país. Algo que no tomaron en serio.
Como los planes del villano fueron frustrados la primera vez por el Capitán Batalla, deciden ir a visitarle a su casa de las afueras para conseguir más información.
Este les recibe y les explica que ese científico loco usó algún tipo de máquina que emitía ondas telúricas. Aquel aparato tarda unos minutos en cargarse y eso les dio un margen para revertir el proceso en aquella ocasión. Piensa que podría hacerlo desde cualquier punto del planeta.
Aquella vez lo localizaron triangulando las lecturas de los sismógrafos. No puede darles más detalles por que Volcano Master consiguió escapar.
Doc Savage llama a sus contactos en centros científicos o universidades para que le envíen los datos sísmicos y con ellos calcula el posible origen del ataque. La máquina debe hallarse en mitad del Océano Índico, casualmente un punto no cartografiado, pues no aparece ninguna masa de tierra en los mapas.
Al día siguiente, los cuatro se reúnen y establecen un curso de acción.
Viajarán de incógnito a Ceilán y allí alquilarán un barco mercante y un hidroavión.
Se preparan y en unas horas embarcan en un vuelo comercial.
A su llegada preguntan en la oficina portuaria y solo encuentran un barco disponible, el Sea Girl, capitaneado por un Galés al que apodan "El Viejo".
Su tripulación no es menos pintoresca. El más peculiar es Steve Costigan, irlandés, marino y boxeador, con su inseparable compañero, el bulldog llamado Mike.
Bill O'Brien, otro irlandés y el mejor amigo humano de Steve. Mushy Hanson, marino danés y poeta amateur. Por último, Sven Larson, un sueco enorme, también boxeador.
Sin contarle mucho al viejo capitán, una vez cargado el hidroavión, un viejo aparato de dos plazas con ametralladoras Vikers y un cañón de 37mm, parten hacia lo desconocido.
El viejo les asegura que en todos sus años de navegación, no ha visto nada recorriendo esa ruta.
A falta de un buen tramo del trayecto previsto, encuentran un denso banco de niebla. Convencen al Viejo de que pare máquinas allí mismo.
Doc Savage pilotará el hidroavión y hará un reconocimiento. Lord Greystoke decide acompañarle y deja a Chita al cuidado del ilusionista. Madrake y La Sombra no tienen más remedio que permanecer en el barco hasta su regreso.
Los dos héroes vuelan entre la niebla unas horas hasta que encuentran una zona despejada y en su centro una isla desconocida que no debería existir. Deciden rodearla para intentar divisar algún rastro de vida. Sin embargo, poco tardan en divisar en el aire otro avión en rumbo de intercepción. Parece un avión de combate alemán mucho más rápido y maniobrable que el viejo hidroavión.
La elección es obvia, deben escapar hacia la niebla antes de que los derriben pero, el caza alemán comienza a dispararles y les alcanza. Con una arriesgada maniobra en picado, Doc Savage es capaz de zafarse del enemigo por unos instantes, lo suficiente para hacer un amerizaje forzoso cerca de la isla y saltar del aparato.
El hidroavión levanta una cortina de agua deslizándose sobre la superficie y termina estrellándose contra los acantilados de la isla. Los dos héroes han conseguido saltar y se sumergen esperando que les den por muertos.
En el Sea Girl, Madrake y La Sombra comienzan a preocuparse. Han calculado el tiempo que deberían tardar en volver sus compañeros y la cantidad de combustible del que disponían. Algo debe de haberles ocurrido.
Piden al Capitán que avance. No escuchan ningún motor en el aire durante el tenso trayecto. Cuando al fin atraviesan la niebla y ven la isla, La Sombra ordena al Viejo parar máquinas y volver a ocultarse en la niebla. Bajará en un bote e intentará llegar a la isla. Madrake y Chita le acompañarán.
A pesar de ser una embarcación pequeña, son descubiertos. Frente a ellos emerge de las aguas un submarino. Rápidamente saltan del bote para simular que ha sido arrastrado a la deriva. Los poderes mentales de ambos pueden enmascararles a los ojos de sus rivales pero, La Sombra presiente que algo malo sucede y Madrake le grita que se aleje del bote, pues ha visto unas burbujas entre ellos y el submarino. El torpedo impacta en su objetivo. Por suerte, la explosión no acaba con ellos.
Ambos deciden nadar hacia la isla pero, La Sombra se acerca al submarino por si sus tripulantes salen a rematar el trabajo. Así contempla algo terrible, de la escotilla surgen ¡tres soldados alemanes que parecen muertos, sus uniformes manchados de sangre, cubiertos de algas y envueltos en una misteriosa fosforescencia!
La isla tiene tan solo una playa accesible desde el mar, los héroes no tienen más remedio que alcanzarla a nado.
¿Se encontrarán en la playa los cuatro compañeros?
¿Que misterios y peligros se esconden en este lugar?
¿Son los alemanes y Volcano Master su peor enemigo o descubrirán algo más oscuro?
... continuará en la siguiente sesión.